miércoles, 2 de marzo de 2011

Psicobloc...


Desde que probé la escalada en Lanzarote siento mucha curiosidad por este deporte. Me gusta.

Es un deporte más en el que desafiar los límites de cada uno. Siempre he creído tener miedo a las alturas, lo cual es imposible ya que el miedo en sí reside en la posibilidad de caerse y no a la altura.

Cuando en aquel bolo apoyé los pies y las manos por primera vez, me di cuenta que la pasión que siento por alcanzar una meta puede acabar con el más grande de los miedos.

Gracias a Nadiuska, Rubén, María,
Alvaro y Miguel que me metieron en este mundillo

No hay comentarios:

Publicar un comentario