lunes, 5 de julio de 2010

Esfuerzo recompensado...


Hace tiempo que Alfonso y yo decidimos participar en esta carrera en categoría parejas. Desde entonces tenía el presentimiento que podiamos ganar y la historia ha sido así...

Normalmente, cuando tengo alguna carrera fuera, me gusta salir de viaje el viernes aprovechando que salgo antes. Este viernes no era así. Me encontraba prestando servicio en un cliente de Guipuzcoa y salía tarde. Para no llegar de noche a Zaragoza, decidimos salir el sábado.

Alfonso V. me acompañó, es mi supporter oficial y siempre que puede me acompaña. Salimos a las nueve de la mañana hacia Zaragoza y a las doce ya estabamos instalados en el hotel. En pleno centro de Zaragoza. La primera etapa de la carrera es el sábado a las 17:30 en un pueblo cercano. Quedamos con Alfonso G. (Almasy) y vamos con él a la carrera.

Llegamos a Valmadrid. El calor es asfixiante y para los que venimos de zonas húmedas incluso diría que contraproducente jeje Recojemos nuestra bolsa del corredor. Nos ponemos el dorsal y vamos a la línea de salida. Alfonso es megacrack corriendo y yo dos días antes había hecho un entreno que me había generado malas sensaciones. En la línea de salida Alfonso se sitúa el primero y yo salgo de un poco más atrás, no tengo prisa. Mi intención es hacer un tiempo normalito, mi prioridad es ganar en categoría parejas y la prueba de hoy no afecta a ésta.

Se da la salida. Me sitúo en un grupo intermedio y según afrontamos la primera subida me empieza a mosquear el ruido que hago al respirar. Las pulsaciones en 180 de forma constante y el ritmo es difícil mantenerlo alto. Da igual, es una carrera corta, puedo aguantar a este ritmo. Durante todo el recorrido voy adelantando posiciones. Hay gente a la que el calor le afecta más que a mi por lo que veo. De repente en medio del recorrido debemos atravesar un patatal. LLeno de surcos por las pisadas de los primeros corredores. En este punto del trayecto es donde doy fe de que donde pongo el ojo no pongo la pata porque estuve a punto de dislocarme el tobillo como unas cien veces. Bajo el ritmo, debo tener cuidado, tengo que estar perfecto para la prueba de BTT de mañana. Salgo del patatal, vuelta a las pistas, última subida y entrada en el pueblo. Ahí están Alfonso y Almasy a los que les sorprende mi pronta llegada jejeje Que poca confianza por dios... Finalmente entrada en meta en alrededor de 35 minutos frente a los 31 de Almasy. Bañito en la piscina y de vuelta a Zaragoza.

Las sensaciones que me deja la carrera en el estómago son horribles y estas me duran hasta la hora de acostarme. Durante la cena noto las molestias, me he sobreesforzado y es el precio a pagar. Vemos el partido de España junto a Almasy, Bea y sus amigas y volvemos para el hotel bajo la lluvia que se presentó sin avisar. Necesitaba tumbarme para descansar.

Después de la primera etapa me acuesto confiado para el día siguiente. Almasy ha hecho un tiempo y una posición espectaculares! Yo no he hecho mal tiempo así que si aprieto con la bici puedo optar tambien al premio individual.

El domingo despertamos temprano, teníamos que ir hasta Belchite y me gusta llegar con bastante tiempo de antelación. Durante el trayecto nos perdemos, perdemos tiempo y llegamos a falta de media hora para la salida. No me gusta la situación. Durante el viaje me he mosqueado pero he decidido canalizarlo para utilizarlo sobre la bicicleta. En Belchite me envisto el traje de Gymnapolis. Coloco mi dorsal en la parte trasera. Últimos ajustes en la bicicleta, ligero rodaje y a la linea de salida. Abrazo antikinestésico deseandome suerte con Alfonso y vamos allá.

Almasy salía desde otro pueblo a la misma hora que yo. Él haría 22 km corriendo y yo 42 en MTB. Las distancias son aproximadas, no estoy seguro de la oficialidad de estas.

En la linea de salida me colocó el primero, delante. Mirada al frente y ganas de victoria. Estoy mentalizado para luchar por las primeras plazas. Es la primera vez que experimento este deseo. Siempre he ido a las carreras con el fin de participar. Esta vez era distinto, iba a luchar por ganar con todas mis fuerzas. Sabía que era capaz de ello.

El organizador se saca una foto en la salida y se acerca a mi para que sujete la bandera de ANUE (algo de Naciones Unidas, eran los organizadores). Me da la mano y abandona. Los de alrededor se preguntarían quien narices era yo, foto, saludo del organizador... No sabían quien era. Iba a ser su peor pesadilla. Retiran el cordón de salida y dan el pistoletazo.

Me situo en cabeza. Salimos del pueblo y avanzamos como flechas. Hemos salido fuerte y al cabo de apenas tres km nos hemos quedado diez ciclistas en solitario. Decido meterme en el centro del grupo, hace algo de viento y de este modo lo evitaré. Pienso que si quiero luchar por la carrera los primeros kilometros son demasiado pronto para destapar las cartas así que mejor pasar desapercibido. Un corredor se distancia del grupo unos metros. No pasan de cinco, no se lo permitimos. Todos vamos a luchar. Miro hacia atrás y por detrás del pelotón no veo ni un alma. Estamos completamente solos. De repente nos plantamos ante una cresta de unos 100 metros y una inclinación considerable. Formamos fila india, bicicleta al hombro y escalamos con todas nuestras fuerzas. Por mi cabeza pasa el pensamiento de que había gente que he visto en la salida que es imposible que consiga subir por aqui. Si caiamos, nos despeñabamos. Llegamos a lo alto de la cresta y la bajada se hace aún más complicada. Pasamos penurias pero finalmente todos lo conseguimos. Atravesamos un campo de trigo y un organizador nos espera. Nos han metido por el camino equivocado. Todo el circuito era por pistas y la cresta era para los corredores. De repente me desanimo. He invertido mucha energía en atravesar ese tramo y aún quedan unos treinta kilómetros de carrera. Nos incorporamos de nuevo a carrera y muchos ciclistas nos han adelantado. El organizador nos ha dicho que neutralizarán dicha parte del recorrido. Me entran ganas de abandonar. Es una clara desventaja haber tenido que atravesar ese crestinferno. Pero estaba ahí para ganar. Competía por dos. Si llego a participar únicamente en categoría "sólo" hubiese abandonado y reclamado el importe de mi inscripción. No he venido hasta Zaragoza a que me tomen el pelo. Afronto los últimos treinta kilómetros como un poseso. Paso de los habituallamientos. Adelanto a muchos corredores y en las zonas menos técnicas me acoplo a la bicicleta para evitar en la medida de lo posible la resistencia al viento. Estoy disfrutando, me estoy esforzando muchisimo pero es una gozada bajar a alrededor de 50 km/h por cuestas llenas de pedruscos sin tenerles ningun miedo.

Empiezo a divisar el pueblo, adelanto a algunos corredores y busco a Almasy entre ellos. Por la pinta que tienen los que adelanto creo que Almasy debe estar muy por delante de estos.

Finalmente entro en meta, dejo la bicicleta y busco a la organización. Estoy completamente indignado. Sobretodo al llegar cuando veo que hay muchos ciclistas que ya estan allí. El organizador me dice que por la cresta hemos atajado 1 km y que no van a neutralizar tiempos, que la llegada va a ser tal cual se ha realizado. En este momento alucino. Le pregunto como es posible que un pelotón que circulaba a una velocidad de 26 km/h invierte 15 minutos en atravesar una cresta y esto supone una compensación de 1 km que hubiesemos cubierto en poco más de 2 minutos.

Me voy indignado a guardar la bicicleta al coche. En el aparcamiento me junto con otro corredor que iba en el primer pelotón. Le pregunto por la situación que hemos pasado y entre risas me dice que ha habido ciclistas que han atajado y han vuelto hacia el pueblo por otro recorrido extra-oficial restando unos 10 km al recorrido oficial. Ya no espero nada. Pero tengo la sensación de haber hecho una buena carrera. Había venido a ganar, a cruzar meta el primero y todo se puso en contra por una mala organización.

En la piscina me junto con Almasy, le comento lo que ha pasado y va a hablar con los organizadores. Antes de que les dijese nada estos le dicen que hemos ganado en categoría parejas. Me lo dice y me pongo muy contento !! Me invade la sensación del trabajo bien hecho. El tiempo a nivel individual queda en el olvido y prescindo de reclamar, me da lo mismo. Sabiendo que hay gente que ha hecho diez kilómetros menos... Vinimos para hacer una buena actuación en pareja y lo hemos conseguido. Hemos ganado !!! Hemos sido la mejor pareja !!!


Además Alfonso G. a sus 37 años ha conseguido el premio en categoría veteranos jajaja Tócate los pies que a los 37 ya seas veterano. Alfonso, míralo por el lado bueno... de no ser así no tendrías dos fotos... jeje


Gracias a Alfonso V. por acompañarme siempre. A la gente que me dio ánimos antes de ir. A mi amatxu por el mensaje de ánimo. A Alfonso, Bea y sus amigas por las risas en la cena. Y sobre todo a Almasy por permitirme compartir con él esta gran experiencia. Entre todos lo hemos conseguido !!!!


P.D.: Es inevitable cada vez que toco una mountain bike tener presentes a los chicos de Jarra Y Pedal.

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